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Sara Díez García

La Casa de la Calle Maple

La Casa de la Calle Maple

Fue un despegue perfecto, pero no nos adelantemos, en realidad la historia comenzó mucho antes.

Era de noche, y de la casa salía un resplandor de la ventana, ¿cómo podía ser  así? La casa estaba deshabitada, o eso creía…

En ese instante, apareció el detective más famoso de aquellos tiempos: Thimoty Farnesio, con su sombrero y su gabardina a juego, que se andaba preguntando: ¿Pero que habrá dentro de la casa? De repente, de la ventana salió una sombra, pero Thimoty no conseguía distinguirla, lo único que vio, fue que la sombra iba vestida con pantalón, camisa y un gorro. Regresó a su oficina a ver si descubría algo sobre la casa, de repente, encontró un libro que traía escrito: Historia sobre la calle Maple, en ese libro se podía leer la historia de la calle, cuando se construyeron las casas… En ese instante, encontró la casa que buscaba, y empezó a leer: Esta casa se construyó en 1876 para dos personas ricas, que se creía que se habían marchado misteriosamente… A Thimoty no le servía de mucho, porque no traía ni nombres ni apellidos, entonces decidió mirar en el periódico, y vio que había una noticia que decía: Robo en la gran casa de la calle maple. Entonces Thimoty decidió ir a investigar en el lugar más de cerca, a través de la puerta se oían llantos que sonaban un poco fingidos de una señora mayor que decía que le habían robado las joyas y la televisión. Entonces Thimoty le preguntó: ¿Cuándo vinieron a vivir a la casa? la señora se quedó parada y cambió de tema. Entonces Thimoty quiso resolver el caso más que nunca, se pasaba horas y horas investigando sobre la casa, hasta que un día lo consiguió, descubrió quienes eran los que ahora habitaban en la casa. En ese momento, se acordó de la señora, tenía las piernas muy peludas, la voz muy grave y sombra de barba, entonces se dio cuenta de que era un hombre y fue a decírselo a la policía. Éstos aceptaron ayudar a Thimoty. Cuando la policía llegó vieron a la supuesta señora, y ésta tocó un botón y la casa salió volando hacia el cielo. A la señora nunca se la volvió a ver por aquella calle y Thimoty resolvió un nuevo caso.

 

 

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